El ojo de la cerradura, y otros relatos

Aquí te presento, benevolente lector, lo que se puede llamar el canto del cisne de mis veleidades literarias. Son una serie de relatos, unos sacados de la tradición popular como “El lobo de Albocácer y la zorra de Tirig”, otros de la tradición literaria oral de La Iglesuela como “Gasparico” y “La maestra de Portell” cuyos argumentos se los debo a
Santiago Tena Mas, “Santiago del Café”, ya fallecido, que me los contó ya hace mucho tiempo y que luego yo le di forma de cuento al primero y compuse a modo teatral el segundo, y el resto, con mayor o menor acierto, tú juzgarás, a mi propio cacumen.
También lo he querido completar con una serie de poesías que compuse en su momento y que guardo, además de en el papel, dentro de mi corazón por lo que supusieron para mí cuando las hice. Al final de las poesías están los dichos. Como ya he explicado en otro lugar son unas composiciones literarias en forma de romance que se recitan la noche de San Antonio antes de prender fuego a la hoguera, antiguamente de memoria y hoy en día, por desgracia, casi todos leyéndolas. Era una parte importante de esta fiesta a la que no se le da la importancia que antes tenía.
Si al terminarlo te ha gustado, te estaré agradecido y será una recompensa al interés que he puesto porque al menos hay alguien que al leerlo le ha agradado.

Severino Carlos Julián Rochela